Por Aldo Ciccione-Chacal
En Anomalías represento, con las deformaciones, la pérdida de la identidad que nos define como humanos en amor y en el crecimiento desmedido del egoísmo, con total decisión y convencimiento, sin ceder en absoluto ante cualquier oposición.
Con la aberración represento la desconfianza naturalizada que se instaló en cada uno de nosotros. La escasa seguridad que nos inspira “el otro” y el orgullo desmedido que nos ha invadido, anulando el genuino pensamiento y el legítimo sentimiento.
El discurso que define Anomalías es el resultado de circunstancias y elementos que intervinieron en mi trabajo de investigación. La mirada de Anomalías está puesta en la esperanza de revertir esta crisis planetaria generada por la lenta evolución del SER debido a este egoísmo que nos domina.
Anomalías define mi sentir y mí pensar sobre la deformación de la actitud humana, la sostenida carencia de comprensión sobre la vida y la existencia contemporánea y su distancia; su larga distancia con una vida digna y en armonía global.
Hermanados. Unidos.
A través de Anomalías represento la deformación física como metáfora visible. Que es una metáfora del desacuerdo. Verán deformaciones que a veces se acercan a una animalidad incomprensible y otras a deformaciones identificables en exceso. Sin embargo, desde cada transformación es posible reconocer o recuperar desde la parte o el todo a la figura humana como representación de la humanidad. Un universo tan anómalo como aleatorio y arriesgado, que he producido desde una intervención digital sobre fotos propias y ajenas, imágenes recuperadas de internet, y sobre mi propia obra.
Anomalías es un llamado a la conciencia profunda. A la conciencia global.
Al amor, a la equidad y la concordia.
- Artista plástico y visual