Salgo a caminar a paso cansino.
La luna se muestra entre el ramaje de la arboleda.
A esta hora el parque parece otro.
Solo algún paseante noctámbulo recorre los senderos junto a su perro.
No todo es belleza.
Una pareja se detiene con su moto de baja cilindrada junto a los contenedores de residuos en la búsqueda de plásticos que ya se fueron en otras manos.
Sopla una leve brisa y como tantas otras veces emerge el clima de la incertidumbre.
En un país donde más del 40 % de las personas son pobres toda belleza se esfuma de inmediato ante tanta injusticia.
Una cartelera iluminada anuncia torres edificios con un eslogan que contiene sarcasmo: “desarrollando futuro”.
A pocos metros sobre cartones con solo una manta una pareja busca conciliar el sueño en una esquina.
¿Futuro? Palabra esquiva y vacía para la mayoría de la población, solo posible alterando de raíz las bases que sustentan el capitalismo.
La noche avanza y la incertidumbre acecha.
Publicado en la ed. impresa #18