Eduardo D’Anna es autor de una vasta obra poética, narrativa y ensayística. La UNR acaba de editarle, en su lujosa colección Confingere, dos intensas novelas policiales, que interpelan al lector no solo desde el argumento sino desde el lenguaje. En diálogo con Barullo contó cómo las gestó, rechazó toda forma de individualismo literario y dio su visión de la ciudad, ajena a la complacencia: “Los rosarinos aplauden cualquier cagada, sobre todo si viene de Buenos Aires o Europa”.